Lujo español en mitad de laSABANA

El sol todavía no ha salido. Al alba, los huéspedes se desperezan mientras preparan sus equipos para admirar uno de los mayores espectáculos del planeta: la gran migración en pleno corazón del Serengueti, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1981 y el parque nacional más antiguo de Tanzania. Se alojan en el Meliá Serengeti Lodge, un hotel en un lugar idílico que, además, basa su filosofía en provocar el menor impacto posible en la región y ser respetuoso con el medio donde está.

Habitaciones ventiladas de manera natural para evitar el uso de aparatos de aire acondicionado, instalaciones construidas con piedra extraída del entorno, árboles replantados en zonas próximas en vez de talados, uso de energías renovables que permiten generar el 50% de las necesidades eléctricas del hotel… La filosofía sostenible impregna este alojamiento en toda su extensión. No hablamos solo de un lugar en cuya construcción no se han utilizado técnicas modernas para reducir el impacto al mínimo sino que las instalaciones también pretenden ser un punto de unión con los habitantes de la región a través del comercio local.

Los desechos de la cocina se convierten en abono que se dona a los agricultores locales gracias a una planta de compostaje dedicada a la gestión de residuos orgánicos. Y si hablamos de comida, no está de más saber que el 90% de los alimentos se obtienen de productores locales. El hotel tiene una instalación para procesar el agua y producir hasta 500 litros al día y dispone, también, de una trituradora de plástico con el objetivo de minimizar el impacto ecológico.

Todos los elementos decorativos que se encuentran en las habitaciones y en el resto de estancias se han manufacturado en la zona y el spa se nutre de productos naturales hechos por una cooperativa de mujeres de Zanzíbar.

Pasemos a las habitaciones. Los artículos de baño son de la marca sudafricana Healing Earth, especializada en productos de alta calidad fabricados con materiales sostenibles y que se presentan en envases reutilizables para reducir los residuos de plástico. Por último, el hotel también cuenta con una línea de productos del Dada Project, una organización sin ánimo de lucro en la que un grupo de mujeres trabaja en la elaboración de alimentos con el acento puesto en la calidad y la frescura.

Situado al oeste del lago Victoria y con todas las habitaciones orientadas hacia las laderas del Nyamuma, el hotel se distingue por unas espectaculares vistas del valle del Mbalageti River. No en vano, todas las habitaciones cuentan con terrazas y las suites están presididas por unos grandes ventanales, que se elevan desde el suelo hasta el techo, en los que perder la vista durante horas.

En este pequeño rincón del Serengueti los huéspedes están acompañados por miembros de la tribu Maasai, cuyo conocimiento de la zona les convierte en los mejores guías. No es extraño encontrarse, gracias a sus consejos, con los grandes protagonistas del lugar: elefantes, rinocerontes, búfalos, jirafas, chacales, leones, cebras, leopardos, hienas, gacelas y aves de todos los colores. Un espectáculo digno de ser admirado.

La noche es también el momento ideal para compartir todas las historias vividas durante la jornada. El Serengueti Lodge cuenta con tres restaurantes, Savannah All Day Dining, Savannah Grill Buffet y Boma, siendo este último el referente de todos ellos. En un claro homenaje a la arquitectura Maasai, el Boma se encuentra situado en un espacio circular al aire libre en el que los comensales pueden cenar bajo las estrellas mientras el croar de las ranas sirve de banda sonora a sus conversaciones.

La cocina del Boma se aleja también de los estereotipos locales ya que el chef Bouya ha optado por fusionar la gastronomía local con la oriental: “Me gusta crear mi propia interpretación con un punto asiático para adaptarlo a los paladares de todo el planeta”, apunta. La mayoría de los alimentos proceden de las regiones cercanas de Arusha y Manvara y se complementan con otros del resto de Tanzania en un intento por apoyar a las comunidades locales.

Los menús de los restaurantes del Serengueti Lodge se caracterizan por mezclar tanto la gastronomía local como la cocina mediterránea. Todo ello en uno de los entornos más salvajes del planeta y con el menor impacto sobre fauna y flora.