24 horas en las arterias subterráneas de Madrid

Madrid. 7:30 horas. La ciudad despierta y sus avenidas empiezan a llenarse de actividad. Mientras el bullicio callejero se repite cada mañana, en el subsuelo discurre una vida paralela, donde los más madrugadores llegan a los andenes minutos antes de las seis de la mañana.

Por el conglomerado de túneles y vías que componen la red de Metro circulan hasta 321 trenes en hora punta y cerca de 2,2 millones de viajeros cada día. Hombres, mujeres y niños de todas las edades, camino del trabajo, hacia la universidad o la escuela… Volviendo a casa o de compras. Seguramente tú eres uno de ellos, pero ¿te has parado a pensar en la verdadera dimensión de esta urbe subterránea que fluye bajo el asfalto?

Metro cierra sus puertas en torno a las 2:00 horas. Pero solo hacia afuera. Porque mientras Madrid duerme, equipos de trabajo nocturnos examinan y realizan el mantenimiento necesario en vías, catenarias, trenes e instalaciones de sus 301 estaciones y 294 km de red. 24 horas, 365 días al año, el suburbano nunca deja de funcionar.

Los duendes de la noche: el trabajo que nadie ve cuando cierra el metro

En 2016, 584 millones de viajeros utilizaron el Metro. Serán 601 millones en 2017

05:30

A las 5:30 horas, los primeros conductores ya están preparados para poner en servicio los trenes y conducirlos desde los depósitos y cocheras a las 24 cabeceras de línea, donde a las seis en punto, siguiendo instrucciones del Puesto de Mando, entran todos en circulación.

2,2 millones de personas utilizan el metro a diario

Explora el volumen de pasajeros en el siguiente gráfico interactivo

Cada punto equivale a 500 pasajeros

Pasajeros:171.334

8.500 cámaras y 1.700 agentes trabajan en la seguridad de Metro

08:30

Como toda gran urbe del siglo XXI, esta ciudad subterránea también vibra en sus horas punta, pero sin los grandes atascos que dificultan la movilidad en la superficie. Hasta 321 trenes pueden llegar a circular simultáneamente en la red para atender las necesidades de movilidad de la ciudad en las franjas horarias más críticas.

Metro ahorra cada año 20.000m3 por uso de agua reciclada en la limpieza de trenes

18:00

El trabajo de todos los equipos de Metro no termina en los túneles por la noche, en la gestión del tráfico o en las estaciones; los trenes tienen que estar también en perfecto estado para que el servicio sea perfecto. En los talleres se realiza el mantenimiento completo de los coches, desde la limpieza, hasta las grandes reparaciones pasando por revisiones periódicas.

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1.La noche

El trabajo que nadie ve cuando cierra el metro

1.234 personas trabajan en horario nocturno en tareas de Operación, Puesto de Mando y Mantenimiento de trenes y de instalaciones. Todos se mueven contrarreloj: disponen de menos de cuatro horas antes de que se reanude el servicio al público, a las seis de la mañana.

Cuando todos los trenes se han encerrado en cocheras, y solo entonces, toman las vías las dresinas, los vehículos auxiliares para el transporte de operarios y material de conservación necesarios para la auscultación y el mantenimiento de vías y catenarias. En su parte delantera, la dresina lleva el carro auscultador, la herramienta que, a su paso, revisa el estado de las vías mediante ultrasonidos para detectar los desgastes y posibles roturas de los raíles. Una dresina recorre entre 6 y 10 km cada noche, y con la información recogida y analizada, se profundiza a pie de vía: el perfilómetro detecta con precisión milimétrica el desgaste ondulatorio; el 'walking stick' localiza las grietas. Todo es tecnología de alta precisión.

El turno de noche cuenta con 1.234 trabajadores

03:30

La sección de Línea Aérea es la que se encarga de comprobar el estado de las catenarias. Para ello, cuenta con 15 máquinas repartidas en tres zonas de trabajo, y su principal tarea –y la más delicada– es detectar los problemas de las catenarias, limpiarlas y sustituir las piezas estropeadas. Aquí, la experiencia es un grado y es muy importante el trabajo de los más veteranos.

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2.Las cocheras

La jornada arranca a las 5:30 horas en las cocheras

Cuando el equipo nocturno inicia su retirada, el primer turno de maquinistas se prepara para poner en servicio los trenes y conducirlos desde las cocheras a las cabeceras de línea. Son las 05.30 horas.

El trabajo y el acceso a un puesto de maquinista es cada vez más exigente, según explica José Luis Galán, que acumula 17 años de experiencia en Metro. Además de una titulación básica en electricidad o electrónica, los candidatos deben cumplir una serie de requisitos físicos y psíquicos y pasar todos los cursos de formación que exige e imparte la compañía, con un reciclaje continuo y periódico a lo largo de toda su vida laboral. “Es un reto diario para el que estamos preparados”, explica Galán. “No es fácil mantener la concentración durante toda la jornada, siendo nuestro trabajo bastante rutinario, pero en constante alerta y bajo condiciones muy cambiantes”.

Más del 75% de la población de 12 municipios tiene una estación a menos de 600m

05:30

“Somos personas y trabajamos para personas”, añade. “Este factor humano es clave en el buen funcionamiento de Metro, ya que la experiencia acumulada nos aporta la capacidad de anticiparnos a los acontecimientos, pudiendo evitar incidencias”.

Alrededor de 1.900 maquinistas, organizados en turnos de siete horas, cubren de seis de la mañana, hasta las 2:00 horas del día siguiente, las necesidades de toda la red, una gran tela de araña de 294 km que llega a 12 municipios de Madrid: cinco millones de personas (más del 75% de la población de estos municipios) cuenta con una estación a menos de 600 metros de su domicilio.

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4.Talleres

Puesta a punto: los depósitos y talleres de Metro

El 70% del agua que se utiliza en la limpieza se recicla a través de un sistema de canalización y depuración

18:00

Pensemos que un tren de Metro es como un coche, pero a lo grande, y que necesita un mantenimiento integral, desde la limpieza hasta las revisiones periódicas de los sistemas de frenado, tracción y comunicación. Las bases de Mantenimiento de Ciclo Corto son los ‘talleres gigantes’ donde se desarrollan todos estos trabajos.

Alrededor de 700 personas trabajan en el mantenimiento de trenes. “Los sistemas más complicados de mantener o reparar son los del equipo de señalización, porque es un elemento electrónico que controla el funcionamiento del vehículo, y los sistemas de tracción”, explica Eugenio García, jefe de servicio de Mantenimiento de Ciclo Corto de Material Móvil. Las puertas son los elementos que registran mayor cantidad de incidencias: cuatro puertas por coche en cada lado, por seis coches que puede tener un tren: 48 puertas que a lo largo de la jornada se utilizan de forma constante.

Las piezas que integran estos gigantescos talleres parecen salidas de un cuento: tornillos, puertas, ejes, raíles, herramientas… Todo tiene grandes dimensiones comparado con los elementos de nuestra vida cotidiana. No hay más que ver los ‘bogies’: grandes círculos planos de hierro unidos por un eje. No hace falta ni preguntar: son las ruedas del metro.

20:30

El interior de cada vagón se barre cada día, y semanalmente se limpia en profundidad por dentro y externamente en un gran túnel de lavado. Anualmente se realizan alrededor de 120.000 limpiezas de este tipo, y el 70% del agua que se utiliza se recoge a través de un sistema de canalización y depuración que permite su reciclado. Así, Metro ahorra cada año 20.000 m3 por uso de agua reciclada en la limpieza de trenes, el equivalente a ocho piscinas olímpicas.

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3.Hora punta

Hora punta: máxima vigilancia desde el Puesto de Mando

Desde el Puesto de Mando se gestiona y supervisa 24/7 y en tiempo real toda la red

08:30

Es en los momentos de máximo tráfico de viajeros cuando el Puesto de Mando entra en máxima ebullición. Alrededor de 200 personas trabajan en este ‘Gran Hermano’ que todo lo ve desde la estación de Alto del Arenal, corazón y cerebro de toda la infraestructura subterránea que atraviesa la ciudad. Desde este gigantesco panel de control se gestiona y supervisa en tiempo real la circulación de los trenes, la afluencia de viajeros en vestíbulos, pasillos y andenes, el estado de las instalaciones y el suministro de energía que requiere la red.

El Puesto de Mando trabaja en coordinación con 112, SAMUR, SUMMA, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Policía Local. Con 212 monitores, 8.500 cámaras distribuidas en estaciones, recintos y trenes, 1.450 vigilantes de seguridad en la red y 250 en recintos y oficinas, casi nada escapa a su control.

En esta ‘nave nodriza’, los equipos se organizan por áreas de especialización: circulación de trenes y personal de conducción, seguridad y protección civil, control de instalaciones de estaciones, suministro de energía y atención a viajeros e incidencias. “Un equipo de ingenieros se encarga de gestionar y analizar continuamente las herramientas y sistemas que se utilizan, realizar modificaciones y elaborar los requisitos necesarios desde el punto de vista de Puesto de Mando para los nuevos proyectos que desde el Área de Ingeniería se emprenden”, explica Rafael López, responsable de esta división.

También es en hora punta cuando los supervisores comerciales despliegan su experiencia y profesionalidad para atender a los viajeros. Una atención directa y personalizada en todas las estaciones desde que el 1 de abril se eliminaran las últimas taquillas. Los supervisores comerciales facilitan cualquier información o ayuda que requiera el usuario: ¿Cómo ir? ¿Cómo llegar? ¿Cómo sacar un billete? ¿Cómo recupero un objeto perdido? “Todo era antes muy manual y muy primitivo”, explica Mª Carmen Fernández, supervisora comercial en la estación de Embajadores, al reconocer que las tecnologías han facilitado sus tareas sin perder el contacto con los viajeros.

Además de atender al público, los 1.650 supervisores comerciales que tiene la compañía se encargan de revisar el estado de las instalaciones e informan de cualquier incidencia al Centro de Operaciones de Mantenimiento y Monitorización de Instalaciones y Telecomunicaciones (COMMIT), el órgano competente que busca la resolución más rápida y sencilla en cada caso.

Al igual que el Centro de Mando, el COMMIT tampoco duerme: monitoriza las 24 horas del día el estado de la red y sus alrededor de 120.000 dispositivos, entre escaleras mecánicas, ascensores, máquinas de venta de billetes, tornos, cancelas, equipos de suministro eléctrico, señales ferroviarias… La dotación de las instalaciones coloca a Metro de Madrid entre los grandes metros del mundo, con 1.699 escaleras mecánicas y 513 ascensores, más que Nueva York, Londres y París juntos. Solo Shanghai le supera.